Por Frank Prieto (*)
En Catalunya tenemos nuevamente más ejemplos de lo bien que lo hace la dictadura cubana para vender sus "verdades" y para movilizar personas a su favor. De paso, además, recaudar unos cuantos euros. En la ciudad barcelonesa de Mollet del Vallés existe una asociación que se llama Mollet amb Cuba que tiene una programación regular de actos culturales y sociales a favor de la dictadura. Recientemente se ha realizado un café-teatro en el que más de dos centenares de personas asistieron a una representación teatral de la obra El Dios mercado y lo recaudado se destinó a proyectos para la Isla.
Este caso es uno más, entre muchos, que nos sirve de ejemplo para explicar cómo la dictadura ha sabido muy bien crear un circuito a través de las múltiples asociaciones y organizaciones que les apoyan en el mundo. Ante esta situación los artistas cubanos estamos empujados a hacer un arte que nada tiene que ver con nuestra realidad y la del pueblo de Cuba o bien a seguir esta línea que es promovida en dichos circuitos. Otros optan por el misticismo y la abstracción. Sale más a cuenta hacer un arte en una línea favorable al castrismo (sea mal hablando del capitalismo o el "imperialismo") que uno que decida hablar de los problemas reales que ha generado la dictadura.
(*) Frank Prieto es actor, autor y director. Alguna de sus obras se puede ver en su blog.
Foto: Frank Prieto en 'Preso', su último montaje.